La estación de esquí y montaña de PANTICOSA se
encuentra situada en el Pirineo Aragonés, al pié del pueblo del mismo nombre, en el
corazón del Valle del Tena. Su situación norte hace que la nieve que cae en sus laderas
se conserve en condiciones óptimas durante toda la temporada. Rodeada de cumbres de más
de tres mil metros crea un microclima único en la zona que junto al paisaje que se divisa
resulta un lugar de gran belleza.
Desde su fundación en 1970 se han deslizado por sus pistas muchas de las personas que hoy
esquían en las estaciones de esquí, siendo un lugar propicio
para todos los niveles, desde principiantes hasta esquiadores experimentados.
Los que han disfrutado en PANTICOSA durante todos estos años de su deporte favorito encontrarán esta próxima temporda un GRAN CAMBIO, instalaciones más modernas, nuevas pistas y mejores servicios, eso sí, sin perder todos aquellos atributos que han caracterizado a la estación durante tantos años, la familiaridad, simpatía y calor de una estación encalvada en un pueblo de montaña, Panticosa....
Para el que conocía la PANTICOSA de 1995 el cambio le podrá resultar sorprendente, nada que ver con lo que hoy en día hay. Una estación modesta y acogedora que con un gran esfuerzo e imaginación ha sabido ponerse en el carro de la modernidad y el futuro, para poder ser competitiva junto con las demás estaciones aragonesas.
PANTICOSA es una estación que está viva durante casi todo el año y prueba de ello es que durante el verano de 1995 cuarenta y cinco mil personas pasaron por sus instalaciones, siendo uno de los lugares más visitados en verano en el Pirineo oscense. La excursión a los lagos naturales Sabocos y Asnos se ha convertido en el trascurrir de los años en visita obligada para todas las personas que se acercan a esta zona.
EL PUEBLO DE PANTICOSA
Si una estación de esquí es importante por ese mismo hecho, mucho más lo es cuando esta se complementa con un pueblo como Panticosa. Poder disfrutar del esquí y poder combinarlo dentro de un lugar lleno de vida, sin necesadad de desplazamientos, de la cama a las pistas, con
hoteles familiares en los que uno se encontrará, casi, casí, comno en su propia casa, bodegas, bares, tiendas, boutiques, o las noches mas divertidas despues de una jornada de esquí. El apre esquí de Panticosa es famoso en el mundillo del esquiador, por su variedad e imaginación y porque en él aparte de una diversión asegurada, se hacen amistades.
Un pueblo y una estación que hacen que unas vacaciones resulten agradables e inolvidables porque en Panticosa todo el mundo trabaja para que el visitante se encuentre como en su propia casa, con un trato personalizado que no se ha perdido con el trascurrir de los años.